Semana 4: Sucursal - Hasta que por fin aprendí que la sucursal NO es una persona jurídica

Hasta que por fin aprendí que la sucursal NO es una persona jurídica

La vida nos enseña que hay que aprender de nuestros errores y yo no fui la excepción. Segundo control de lectura: Denominación, domicilio, nacionalidad, capacidad y representación. Era momento de responder el verdadero y falso y la segunda pregunta era: “Una sucursal es una persona jurídica?”. Yo, muy confiado y sin pensarla, marque verdadero. Terminando el examen todos me dijeron que no era una persona jurídica y yo muy terco dije que sí. El día de la entrega, fui con el pecho inflado a recoger mi examen y vaya sorpresa que me lleve: Era falso!

Luego de una corta y concisa discusión sobre el tema, se me quedo más que grabado que la sucursal NO es una persona jurídica.

Como ya había mencionado antes, se aprende de los errores y eso fue lo que hice. Empieza el examen parcial y veo que en una pregunta de verdadero y falso decía: “Una sucursal es una persona jurídica”. Esta vez, sin pensarlo y 110% seguro, marque falso y jure nunca más equivocarme en eso, lo tenía grabado en mi cabeza, más aun cuando después de mi grave error la profesora nos contó que un chico que hizo su tesis de personas jurídicas no respondió bien esta pregunta y lo jalaron. Pobre.

Según Montoya Manfredi, una Sucursal es el establecimiento secundario a través del cual una sociedad desarrolla, en un lugar distinto de su domicilio, determinadas actividades comprendidas dentro de su objeto social. Ahora, tengo esta definición prácticamente tatuada en la cabeza. Las sucursales necesitan un representante que será la persona facultada para celebrar válidamente todos los convenios que sean necesarios para que la sucursal pueda desarrollar sus actividades, las cuales pueden ser ejecutadas en otras ciudades del país como también en otras ciudades del extranjero, siempre que su estatuto no lo prohíba.